Jo estic encantat de ser aquí
a casa teva, la blanca,
la de la cantonada,
la que va estar envoltada de solars
i ara ho és de cases:
la teva, la casa blanca.
I em sembla sentir-te ben a prop,
com si el teu esperit ens observés
a la menuda i a mi,
amb un ampli somriure:
ella enfront del porxo, jo a sota,
com tu feies fa uns anys,
no en fa tants,
a la teva casa blanca.
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Yo estoy encantado de estar
aquí
en tu casa, la blanca,
la de la esquina,
la que estuvo rodeada de
solares
y ahora lo es de casitas:
la tuya, la casa blanca.
Y me parece sentirte bien
cerca,
como si tu espíritu nos observara
a la pequeña y a mí,
con una amplia sonrisa:
ella enfrente del porche, yo
debajo,
como tú hacías hace unos
años,
no hace tantos,
en tu casa blanca.
Bonica tornada a la casa blanca, aquella que ha quedat intacta a la memòria
ResponEliminaXelo.
EliminaGràcies per acostar-te als meus versos.
Muy bonito y emotivo amigo Gabriel
ResponEliminasaludos
Antonio
Gracias Antonio.
EliminaSiempre un placer verte por aquí.
Gràcies,Gabriel,per les teves paraules,amples com aquest somriure que trobes a faltar,clares,plenes de brisa Mediterrània.
ResponEliminaFunny Valentine.
Gràcies Valen.
EliminaM'agrada això que dius de la brisa mediterrània.
Petons dolços.
Esa pequeñanos acompaña gracias a ti, ella ya también nos ilumina a todos y ya vemos en tus versos siempre esa maravillosa sonrisa ( aunque en la foto esté de espalda) se presiente!!
ResponEliminaBesos Dulces
Gracias Chyqui.
EliminaSiempre un verdadero placer y lujo tener tu alma sensible en este blog.
Besos dulces.
Un recuerdo para alguien que se ha marchado recientemente, verdad?
ResponEliminaAsí lo interpreto, y así lo disfruto.
Un besazo.
Sete.
EliminaEn efecto, hago referencia a mi padre, quien hace unos añitos que ya no está entre nosotros.
Besos dulces.